En los últimos años se ha podido entender a la biodiversidad como la extensa variedad de plantas, animales y microorganismos existentes. Este término también incluye a las diferencias génicas que conforman a estos seres vivos, así como la variedad de ecosistemas que hospedan múltiples interacciones entre sus miembros y su entorno.

Actualmente, el problema que enfrenta el mundo ante la pérdida de esta diversidad está afectando todas las esferas en las que nos desenvolvemos. Múltiples grupos de científicos han evidenciado que esta disminución de especies tiene consecuencias adversas tales como, el cambio climático, la contaminación, la destrucción de hábitats, la proliferación de plagas, entre otras. Inclusive la salud de los seres humanos se ha visto comprometida pues, ante el grave problema que tenemos con la conservación de la biodiversidad, el riesgo de aparición de enfermedades infecciosas transmisibles al ser humano aumenta “notablemente”, tal como la enfermedad producida por el virus SARS-CoV-2 como indica el último reporte del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF).

Es un hecho, que en el contexto en el que nos encontramos deberíamos volcarnos a ser más reflexivos con respecto a la valoración de la diversidad biológica como piedra angular del desarrollo sustentable; sin embargo, la pérdida de especies sigue en aumento debido principalmente al deterioro y perdida de hábitat en su mayoría ligadas actividades de las poblaciones humanas. Este contexto marca la importancia de la educación y la conciencia pública sobre esta amenaza, las Naciones Unidas decidieron proclamar la celebración del Día Internacional de la Diversidad Biológica cada 22 de mayo; en este 2021, el tema es “Soy parte de la solución”.

Por lo anterior, y ante su preocupación por el estado ecológico de nuestro estado, el Posgrado en Ciencias Biológicas (PCB) organizó el seminario Agua, Cobertura Vegetal y Descortezadores: Los Problemas Ambientales que nos Aquejan en Tlaxcala para discutir los estragos ambientales que hemos causado y las posibles acciones para su mitigación a cargo de los doctores Juan Suárez Sánchez y Sandra García de Jesús.

Impacto del cambio climático en Tlaxcala

El doctor Suárez Sánchez, quien dio inicio al seminario, compartió un panorama mundial sobre el agua como un recurso limitado, pues sólo 2.5% de su totalidad en nuestro planeta puede ser utilizada para las poblaciones humanas. Sin embargo, 70% del líquido aprovechable está congelado en glaciales o en hielos perpetuos y casi 30% restante se encuentra en asentamientos subterráneos, de tal manera que menos del 1% del agua existente es agua utilizable para consumo humano, ecosistemas y otras actividades.

Asimismo, detalló que, del agua que utilizamos para las actividades humanas, 69% se distribuye en gran medida al sector agropecuario, 19% al industrial y 12% al municipal.

A su vez, reflexionó sobre las dificultades que hacen complicada la disponibilidad del agua: su forma de presentarse en la naturaleza, el problema de distribución espacial (asentamientos humanos en determinados espacios geográficos) y su distribución temporal (precipitaciones).

Con base en lo anterior, contextualizó los problemas antes mencionados en Tlaxcala, estado de la república considerado como una zona con estrés hídrico, puesto que la demanda de agua es más alta que la cantidad utilizable debido a que su disponibilidad es menor a mil metros cúbicos por habitante al año en comparación a los 10 mil de otros países.

Ante tal situación tomó la oportunidad para hacer evidente el impacto del crecimiento poblacional y el Cambio Climático Global (CCG) en el balance de la subcuenca del Río Zahuapan.

“En los próximos años, se espera una disminución en la precipitación pluvial de México por efecto del CCG” señaló, esto debido al aumento de la temperatura mínima y máxima promedio que están alterando los patrones de lluvia no sólo en Tlaxcala, sino en el mundo. Lo anterior “mermará la renovación del agua subterránea y el impacto sobre los acuíferos afectará a las fuentes superficiales de agua y a los ecosistemas”.

El impacto en la producción agrícola será devastador, indicó, ya que muchos ciclos a los que están asociados insectos y plantas serán afectados tanto por la ausencia de frío como de calor y habrá abundancia de insectos que posteriormente se convertirán en plagas, por ejemplo, el escarabajo descortezador.

A través del desarrollo de un modelo de simulación en WEAP (Water Evaluation And Planning System) que llevó a cabo con su grupo de investigación, el doctor Juan Suárez Sánchez logró generar un escenario futuro de la demanda y disponibilidad de agua a 10 años.

“Si hacemos una proyección sobre el crecimiento que tienen las poblaciones y la actividad agropecuaria actual en el estado de Tlaxcala se puede experimentar incrementos de 27% en la demanda de agua” declaró, aunado a la disminución del 6% de precipitación cada 10 años.

El investigador concluyó su participación y sostuvo que los resultados muestran un panorama desfavorable, pero que aún estamos a tiempo para llevar a cabo estrategias y medidas de mitigación, tales como la reforestación del área de la cuenca, lo que incrementaría el 11% en el almacenamiento del acuífero, o el adecuado tratamiento y uso de agua residual para actividades específicas que reduciría el 16% de demanda de agua por años. Posteriormente dio la palabra a la doctora García.

Pérdida de la cobertura Vegetal. El incremento del daño por escarabajos descortezadores

En su participación, la también investigadora de la Facultad de Agrobiología de la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT) contextualizó sobre una de las problemáticas ambientales más alarmantes: la pérdida de cobertura vegetal por insectos.

“Se ha visto un incremento en la mortandad de árboles por otros organismos, uno de ellos, es el escarabajo descortezador”, alertó. La incidencia y daño por estos insectos sobre sus árboles hospederos se ha incrementado en años recientes en los bosques templados de todo el mundo como Canadá, Estados Unidos y múltiples países asiáticos hasta convertirse en un patrón, pues a partir del año 2010 se identifica una incidencia más frecuente.

En México, investigadores han trabajado para hacer un diagnóstico de la vulnerabilidad al ataque de escarabajos descortezadores a partir de una estrategia biogeográfica que identificó las zonas más propensas al ataque de estos organismos. Esto con el objetivo de definir las áreas que podrían experimentar un alto impacto por estos insectos y también proporcionar una base de datos geográfica útil para el manejo de los recursos forestales y las políticas de conservación en México.

Hizo mención de que, a través de un Índice de Amenaza al Escarabajo Descortezador (BBTI) propuesto por Salinas-Moreno et al. (2010), se ha encontrado que la coexistencia geográfica de hasta 12 especies de escarabajo descortezador (Dendroctonus) y la diversidad de pinos predispone a una zona biogeográfica a una mayor vulnerabilidad o amenaza de mortalidad de árboles. Con los resultados del BBTI los autores mencionan que una de las regiones biogeográficas más afectadas por este grupo de insectos es la Franja Volcánica Transmexicana (FVTM), estando Tlaxcala en el grupo de los 14 estados que se asientan en ella y que alberga a P. leiophylla, el pino de mayor distribución en el estado.

Explicó que la diversidad de pinos es el principal factor determinante de la BBTI a nivel regional, mientras que las perturbaciones antropogénicas como la contaminación, los incendios, la extracción de madera y el cambio del ecosistema son los factores clave detrás de las altas BBTI a nivel local.

“La incidencia y el desastre que ha ocasionado este insecto ha aumentado en poco tiempo en la última década” indicó. Pues, al igual que para los patrones de precipitación, el aumento de la temperatura máxima es uno de los factores determinantes para su distribución, como indicó el doctor Suárez anteriormente, en ecosistemas como el bosque templado donde es preciso para los cambios de distribución en la vegetación y las condiciones climáticas.

“El aumento de la temperatura incrementará una mortandad de árboles y un recambio de la vegetación actual a una más seca, factor aprovechado por los descortezadores ya que tienen una relación completamente positiva y significativa con esto” explicó, pues “antes estos escarabajos eran controlados por el clima frío del bosque templado”, pero ante la alteración de temperatura, los inviernos son más cortos y menos intensos lo que altera su ciclo de vida, por lo tanto, también el de sus periodos de reproducción que se vuelve más extensa.

Aunado a lo anterior, el estrés generado por la alteración de distribución pluvial, generan estrés ambiental en los árboles de bosque templado o en pinos de elevaciones bajas, lo que los hace aún más susceptibles a escarabajos descortezadores o patógenos naturales como hongos y bacterias que aumentan la mortandad.

La muerte de árboles en áreas grandes o Decaimiento Forestal se ha registrado en estados como Michoacán, Hidalgo y México; sin embargo, Tlaxcala, al reunir las condiciones altitudinales, ha comenzado a replicar esta situación en el Parque Nacional La Maliche (PNLM) donde ya se ha comenzado a ver la muerte de arbolado de pino (P. leiophylla, P. teocote y P. montexumac principalmente), así como en el campus Rectoría de la UAT.

“La hipótesis de Decaimiento Forestal continuará y será más severo”, citó, por ello, “hay que poner en el monitorio de los descortezadores asociados a los árboles hospederos de Tlaxcala” y así evitar más pérdidas de especies vegetales, dijo.

La doctora Sandra García de Jesús concluyó apoyando la idea de que la reforestación asistida podría ser la solución para seguir manteniendo la cobertura forestal por especies de Pinus en los bosques del PNLM, principalmente en sus altitudes más altas.

Con base en estas conclusiones, es evidente la necesidad de emprender acciones orientadas al manejo sostenible de nuestros recursos, basadas en investigaciones científicas que permitan la conservación del recurso hídrico, vegetal y social, pues todos somos parte de la solución.

Detalles del autor

  • Nombre(s): José Manuel López Vásquez