Llegué en 1995 al Centro Investigaciones Fisiológicas ahora Centro Tlaxcala de Biología de la Conducta. Los estudios que desarrollaban estaban orientados a la fisiología del área pélvica. En el tránsito de mi formación académica me dediqué a realizar observaciones de la conducta de parto de la coneja y la rata. Aunque ambas especies tienen tamaño de camada similar, a diferencia de la rata, la duración del parto de la coneja es cinco veces más rápido, durante el parto lame y amamanta algunas de sus crías; finalizando el parto, se aleja de la camada para volver nuevamente a aparearse, resultando con ello la condición de gestación-lactancia simultáneas. Mis observaciones continuaron ahora para dicha etapa. Si las conejas gestantes-lactantes tenían libre acceso al alimento, el crecimiento y sobrevivencia de sus crías eran similar a las de conejas que solo estaban lactando. Sin embargo, la duración de la lactancia era más corta por el nacimiento de las siguientes crías. En contraste, cuando restringimos el alimento, conejas que están gestantes-lactantes simultáneamente mantienen su peso corporal e indicadores de salud como el hematocrito, glucosa y hierro; pero sus crías al nacimiento y en las primeras semanas de vida, tienen bajo peso corporal y una disminución en la sobrevivencia
Al finalizar el posgrado retomé la rata como modelo de estudio en un proceso no reproductivo del área pélvica que es la micción. Teniendo como antecedente en mujeres menopáusicas que los problemas urinarios incrementan; extirpamos quirúrgicamente los ovarios en la rata (ovariectomía), a fin de mimetizar la disminución en las concentraciones de hormonas gonadales en la menopausia. Encontramos que la restitución de estradiol y progesterona a dosis baja no abatió los signos de incontinencia urinaria, sino que los exacerbó. En contraste, a dosis altas, no se presentaron signos de incontinencia ni frecuencia urinaria, pero sí aparente retención urinaria. Actualmente, a fin de tener un modelo más cercano de menopausia, utilizamos ratas viejas con múltiples partos a las que aplicamos estradiol localmente. A pesar de que la restitución hormonal es una terapia para tratar la incontinencia urinaria, los resultados son muy variables, lo que alienta a seguir indagando.